¿Se le ha ido la mano exponiendo datos personales en Facebook o Twitter? No le culpamos. Un breve repaso por cualquiera de estas redes podrá mostrarnos las fotos de vacaciones de cualquier conocido, o bien lo estupendamente que lo pasamos en la última fiesta a la que acudimos. En las redes sociales se dan cita, por un lado, el lado más exhibicionista de cada usuario, y por otro, los aviesos cotillas que circulan por la red. Hay que tener en cuenta que en Twitter contamos más o menos lo que hacemos en cada momento, en Facebook exponemos nuestra colección de fotos familiar, y en redes como Foursquare o 11870, dejamos rastro de dónde hemos llegado a comer. Llegados a este punto, el arrepentido usuario de cualquiera de estas redes sociales puede optar por la solución drástica de eliminar su perfil de las mismas, o bien optar por el nuevo servicio denominado muy gráficamente "Suicidio 2.0".
La mejor manera de desaparecer del 2.0, sería a través de este servicio que nos ahorraría la procelosa tarea de ir eliminando cada perfil. "Web 2.0 Suicide Machine", como se llama la web, acaba con toda nuestra vida 2.0 de un plumazo y sin dejar rastro. Pero avisan de algo a tener en cuenta: si desea contratar sus servicios de este matarife virtual, deberá saber que no tiene vuelta atrás, y que una vez eliminado su perfil de la red, no habrá manera de recuperarlo. En realidad, el sistema lo que hace es acabar con toda la información publicada hasta la fecha para dejar su perfil vacío de contenido y en el esqueleto, pero mantiene las cuentas a cero para que pueda empezar una nueva vida 2.0. El servicio es, por el momento, completamente gratuito y los administradores garantizan que no guardan una sola coma de sus datos personales.
Llegados a este punto, cabría debatir sobre la conveniencia de exponer una serie de datos de nuestra vida en la red o no. ¿Se es un paranoico por borrar toda la traza de una persona en Internet? Tampoco puede afirmarse con rotundidad que aquellos usuarios que exponen más información de índole personal que otros estén siendo acosados por desaprensivos ni vean una merma en su privacidad. Sin embargo, un buen número de usuarios no puede dar rienda suelta a su lado más exhibicionista, y según podemos leer en Time, se ha puesto de moda en Facebook contar las 25 características de cada usuario en su perfil. Dicho de otra manera, cada usuario de esta red social se 'confiesa' y expone a sus lectores características completamente íntimas de su persona (anécdotas, gustos, meteduras de pata... todo lo que pueda imaginar). Imagine esta información en manos de su peor enemigo. En definitiva, es posible mantener una presencia prudente en las redes sociales, donde cada usuario pueda destilar de alguna manera la información que desea hacer pública y guardarse para sí lo que considere personal. Y si vienen mal dadas, ya sabe: suicidio 2.0.
Enlace articulo original: http://www.elconfidencial.com/tecnologia/desaparecer-redes-sociales-20100125.html
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